“Es urgente que la Academia de la Magistratura incluya el enfoque y cursos de género en su currícula académica en forma regular, para que jueces y juezas entiendan a las mujeres cuando éstas pasen por un proceso judicial, especialmente cuando denuncie delitos contra la libertad sexual”, demandaron esta mañana lideresas de la Federación de Mujeres Organizadas en Centrales de Comedores Populares Autogestionarios y Afines de Lima (FEMOCCPALM) y representantes del Estudio de Defensa de los Derechos de la Mujer (Demus) al Presidente del Consejo Directivo de la Academia de la Magistratura, Francisco Távara Córdova.
El encuentro se realizó como parte de una ronda de Diálogos Ciudadanos que realizan las lideresas de comedores populares con autoridades del sistema judicial, llevando las demandas de sus asociadas.
“La violencia sexual es un tipo de violencia que afecta principalmente a las mujeres, nuestras socias nos transmiten sus problemas”, afirmó Violeta Pérez, dirigenta de FEMOCCPALM, durante la reunión. Las cifras del Observatorio de Criminalidad del Ministerio Público entre enero y agosto del año pasado, las más recientes en el tema, evidencian esta afirmación: se han registrado más denuncias por delito de violación sexual (5,286 denuncias por violación de la libertad sexual en Lima Metropolitana y el Callao), que por delitos de hurto y robo.
La urgencia para esta formación especializada en género y derechos fundamentales de la mujer, dirigida a magistrados y magistradas, se plantea porque esta la incidencia de denuncias sobre violencia sexual no es una cifra del momento. En los últimos diez años en el país se han registrado 63 mil 545 denuncias por violación de la libertad sexual y la mayoría de ellas (el 38.4%) se cometieron en Lima, según estadísticas policiales, convirtiendo al Perú en el país con más violaciones sexuales en Sudamérica (*).
“La respuesta a estas denuncias no puede seguir siendo la impunidad”, resaltó Luz Medina, también dirigente de la FEMOCCPALM. Según afirmaciones del presidente del Poder Judicial, César San Martín, en el 90% de procesos judiciales por violación de mujeres mayores de 17 años, los victimarios son absueltos o el Ministerio Público no formula una denuncia contra ellos por falta de pruebas.
Una de las causas para esta impunidad tiene que ver con la presencia de estereotipos de género en los jueces y juezas, afirmó María Ysabel Cedano, abogada de Demus, durante la reunión con los directivos de la AMAG, citando informes de la Defensoría del Pueblo.
Las otras cifras de violencia contra la mujer refuerzan también esta urgencia: de las 100,800 denuncias ante Policía Nacional del Perú por violencia familiar (año 2010), más del 90% corresponde a las mujeres; y entre enero y julio del año pasado, 48 mujeres fueron víctimas de feminicidio.
Por ello, agregó Cedano, la especialidad en género tendría que ser un requisito para ingresar y ascender en la carrera judicial, tema que también será visto por el Consejo Nacional de la Magistratura.
Este es el segundo Diálogo Ciudadano que sostienen las dirigentas de la FEMOCCPALM. El primero se llevó a cabo el pasado 17 de octubre, con representantes de la Defensoría del Pueblo.
Lima, 29 de Octubre 2012
(*) “Violaciones
sexuales en el Perú 2000-2009: un informe sobre el estado de la situación”, libro de Jaris
Mujica.